¿El libro digital es libro?

Los amantes de la lectura suelen ser muy fetichistas con los libros: ya se por autores, colecciones, editoriales o librerías, buscan una experiencia sensorial al que le añadiría el tipo de letra y su tamaño, el tipo de papel y encuadernación, sin dejar de mencionar el diseño y la portada. ¿Es posible imaginar todas estas experiencias con un archivo digital que se asemeja a un libro? ¿El libro digital es libro?

El e-book, frío como casi todo lo electrónico (fotografía, redes sociales, videollamadas), debe competir con muchas desventajas, pero, lo que es más grave, no aprovecha las ventajas que tiene para poder posicionarse. Además del menor precio (el libro “Contra Amazon”, de Jorge Carrión, por ejemplo, cuesta, en Amazon, 20 dólares y en Kindle 12 dólares, 40% menos).

Amazoon Books donde se puede pagar pero no llevar el libro.

¿Tiene otras ventajas el e-book sobre nuestro amigo de papel? Entre las mencionadas en una encuesta de este blog figuraron la disponibilidad de diversidad (no se agota el stock), ampliación del tiempo y los lugares de lectura (portables, se pueden consultar en cualquier lado, hasta sin luz) y su durabilidad (lo que también implica compartir el archivo de forma libre, al igual que el de papel).

Pero no se han potenciado estas ventajas, al pensar que el libro digital es la versión electrónica del libro físico, sin introducir novedades que deberían copiarse del antiguo DVD (bonus tracks, por ejemplo, o escenas eliminadas), del streaming (una versión hablada del texto o los comentarios del autor al final de los capítulos) o el hipervínculo. ¿Por qué los libros digitales no usan links a contenidos enciclopédicos o referencias a otras lecturas?

Hay algo de desidia en la idea de crear un libro digital capaz de aprovechar recursos tecnológicos, herramientas como Wattpad y SoopBook, que ayudan a crear públicos más participativos, u otras herramientas digitales como la fotografía, el audio y video, para crear productos más creativos que el viejo amigo libro, caro al incluir elementos visuales (como las novelas gráficas), e impersonal (¿se imaginan un libro en el que el lector pueda diseñar una falsa portada personalizada o aplicaciones para crear sus propios personajes?).

Algunos comentarios sobre el libro digital extraídos de una charla organizada por la Biblioteca Nacional del Perú:

La industria editorial sigue en manos de lectores tradicionales que no han aprovechado los públicos de lectores de youtubers para desarrollar contenidos digitales especiales y seguro muchos alegarán la rentabilidad (siempre es más fácil el modelo económico clásico, la venta de papel) como excusa y las barreras para el cobro electrónico o la piratería de los PDF. Aquí algunas propuestas para superar estas dificultades.

1-Crowdfunding para financiar el desarrollo creativo y tecnológico de cada libro.

2-Acceso a libros como usuarios, a la manera de Scribd y Google Books, para evitar la piratería.

3-Vender contenidos digitales adicionales de los best-sellers y otras publicaciones (fotolibros, por ejemplo) a través de páginas web.

4-APP que conviertan al libro digital en un producto más interactivo, con indicadores que ayuden a monitorear la lectura.

5-Apuntar al público infantil, más propenso a herramientas digitales, con materiales didácticos y que fomenten la sociabilidad.

No, señores, el libro digital no es un libro. Pero puede ser mucho más.

El librero.

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